El interior revuelto
genera confusiones y tratados
Reflejos equidistantes
sobre el laberinto
de espejos que deforman
¿Quién es ése de ahí?
¿Y ése que va allá?
Nadie se arriesga
a predecir a nadie
Y yo sólo retrato
el interior de voces
como un tic
de la angustia
leyendo su libro
de autoayuda
sin éxito
(Febrero, 2000)
No sé si logra transmitir el ahogo que trata de retratar, pero me divierte la idea de la angustia leyendo un libro de autoayuda sin éxito!
sábado, 5 de julio de 2008
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1 comentario:
También me resulta graciosa la idea de no entender ESE libro de autoayuda. Un recurso que hace que uno se sienta automáticamente identificado. Me gustó.
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